La nueva generación debe mirar más allá de los estereotipos de género

Artículo de Penny Marshall publicado en ITV News, 7 de febrero de 2018.

Mientras que las mujeres adultas comienzan a desafiar la injusticia en el lugar de trabajo, los niños de hasta siete años tienen su propia brecha de género, como muestran nuevas investigaciones.

Esto ocurre porque algunas de las barreras a las que se enfrentan las mujeres son culturales y se establecieron a principios de la infancia.

La investigación sugiere que los estereotipos de género empiezan y forman vidas, limitando las decisiones que las mujeres tienen más adelante en la vida, y no hay suficiente escoger la ciencia y las matemáticas como materias básicas para estudiar.

La investigación también demuestra que las visiones de los jóvenes sobre trabajos y carreras cambian poco entre los siete y los 17 años y están influídas por la familia y la televisión más que ninguna otra cosa.

Cuando se les pidió dibujar una foto de un bombero, un cirujano y un piloto del ejército, el 92 por ciento de 13.000 niños de primaria los dibujaron como hombres.

El número de chicos que quería incorporarse al ejército y al servicio de bomberos es más de cinco veces el de chicas, y el doble de chicos que chicas querían ser científicos.

Las niñas querían ejercer funciones en profesiones de cuidado, como veterinarias y profesoras.

Katherine Rundell, escritora juvenil, considera que los mensajes que las niñas interiorizan necesitan cambiar. Y ve las heroínas que escribe en sus libros como una manera de cuestionar los estereotipos existentes.

Durante demasiados años, los personajes femeninos de la ficción a menudo han sido pálidas imitaciones de sus homólogos masculinos. "Los chicos salen a la conquista y las chicas hacen la colada“.

Más tarde, en la universidad, incluso las mujeres más brillantes se enfrentan a barreras.

Las mujeres ahora superan a los hombres en la universidad, pero aunque ambos sexos llegan con iguales notas a Cambridge, más hombres salen graduados con notas de excelencia.

Dame Carol Black, directora del Newnham College de Cambridge, dice que el carácter importa tanto como el cerebro y que quizás nos hemos focalizado demasiado en equipar a las chicas con los conocimientos adecuados y no con suficiente carácter.

Newnham ahora ejecuta programas para estimular la confianza en mujeres.

Un cambio de comportamiento y de aspiraciones implica cambiar la cultura y las expectativas. Las mujeres han recorrido un largo camino desde que se les permitió votar pero las chicas podrían ir más lejos si se les anima a mirar más allá de los estereotipos de género.